CHANEL Crucero 2025/26: desfile junto al Lago Como

Una oda a la elegancia fluida y cinematográfica en un enclave legendario, con guiños al cine y la vida de hotel.
La colección Crucero 2025/26 de CHANEL encontró su escenario perfecto en la Villa d’Este, a orillas del Lago Como. Esta legendaria propiedad italiana ha acogido a artistas, actores y aristócratas desde hace siglos. Su entorno sereno, rodeado de jardines centenarios y arquitectura renacentista, fue la inspiración central para esta nueva entrega de la maison.
Con la visión creativa de Sofia Coppola y el equipo de diseño de CHANEL, la propuesta se presentó como un tributo a los días soleados, las noches lentas y el arte de vestirse sin prisa.


Colores del paisaje y siluetas que acarician el cuerpo
La paleta de colores refleja las luces y sombras del Lago Como: tonos ocres, amarillos cálidos y pastel delicados como el rosa y el azul. Estos matices habitan vestidos de tafetán con volantes, trajes de tweed ligero y conjuntos vaporosos que celebran el movimiento.
Los tejidos brillantes como el lamé y el lurex conviven con bordados minuciosos y drapeados que aluden a una elegancia cotidiana, sin rigidez. Cada pieza rinde homenaje a la libertad de vestir con intención, estilo y placer.
Te podría interesar: Puntadas de Arte, camisas artesanales y sustentables


Referencias al cine y a la dolce vita italiana
Siluetas como el mono de rayas rosas con espalda descubierta o los trajes acampanados bordados en lentejuelas evocan las décadas doradas del cine italiano. Películas de Luchino Visconti —amigo cercano de Gabrielle Chanel— inspiraron las atmósferas nostálgicas de la colección.
La vida nocturna del norte de Italia se plasma en los tejidos, cortes y detalles como capas etéreas, capas de tul y mallas bordadas que recuerdan los antiguos bailes de verano a la orilla del lago.
Te podría interesar: Como elegir tu primera bolsa de lujo


Flores, encajes y la herencia natural de la Villa d’Este
Las flores del jardín magnolias, camelias, glicinas se trasladan a trajes de falda bordados, spencers con cuentas y vestidos de gasa decorados con rayas florales. Esta estética botánica no es decorativa, sino estructural. Reafirma el vínculo entre la mujer CHANEL y el mundo natural, como una extensión sutil de su feminidad.
Toques náuticos y detalles que construyen carácter
La colección también retoma códigos náuticos con un enfoque refinado. Aparecen pantalones rectos blancos, sacos de estilo marinero y jerséis a rayas reinterpretados en colores suaves. Estos elementos aportan frescura, sin caer en el cliché. Las rayas atraviesan vestidos, polos y cardigans, que se combinan con accesorios gráficos y de fuerte presencia visual, construyendo una narrativa coherente y atemporal.


Te podría interesar: Fashion Group México presenta la primera Ruta de la Moda
Accesorios que definen el estilo con nostalgia y actitud
Perlas en collares dobles, guantes largos, bolsos joya y pañuelos de seda aportan dramatismo con códigos clásicos de la maison. Sandalias con tobilleras, gafas negras oversized y mules de charol refuerzan el aire cinematográfico y cosmopolita que define esta entrega. Cada accesorio tiene intención y peso, sin restar ligereza al conjunto.


Una visión cinematográfica del lujo contemporáneo
La colección Crucero 2025/26 de CHANEL se percibe como una carta de amor a la belleza italiana, al arte de vivir con elegancia y al legado de la moda. A través de siluetas relajadas, detalles artesanales y referencias culturales, CHANEL reafirma su lugar en la conversación global de estilo. Este desfile no fue solo una pasarela, sino una narración visual que invita a imaginar un verano eterno en el norte de Italia, donde la moda respira con naturalidad.